(iProfesional) El Enacom, la subsecretaría TIC y Arsat impulsaron un convenio para que las telcos resuelvan de manera conjunta eventuales cuellos de botella en las redes.

Yo te banco. Podría ser el nuevo slogan de comportamiento que compartirán, a partir de ahora, las operadoras de telecomunicaciones ante cualquier problema que pudiera surgir en la infraestructura de telecomunicaciones, fija o móvil, en el marco de las emergencias que surjan por el coronavirus.

Es parte del acuerdo que esta tarde sellaron la Empresa Argentina de Soluciones satelitales (Arsat) junto con las principales operadoras de telecomunicaciones del país, Telefónica, Telecom, Claro y Silica Networks (Datco) con el objetivo de que se den soporte mutuo en el eventual caso de que alguna red se vea colapsada y requiera de la disponibilidad de otra, de cualquiera de este grupo de empresas, para que los servicios de telecomunicaciones continúen en funcionamiento sin restricciones. De ahí el yo te banco.

La iniciativa forma parte de las medidas que se impulsan desde el Gobierno nacional para asistir la emergencia que se plantee cuando comience a elevarse más rápidamente el nivel de contagios en el país y se llegue al pico, previsto para los últimos días de abril y los primeros de mayo.

De ahí que se promueva el apoyo recíproco de la capacidad de las redes para enfrentar eventuales contingencias en el tráfico en la Argentina, sea porque se incremente el nivel de comunicaciones entre las personas y/o entre los organismos públicos más sensibles a la atención de pandemia, o porque surjan otras incidencias, como un ataque informático.

Aunque las compañías han señalado que, hasta el momento, sólo se ha registrado un aumento en el tráfico desde que se inició el aislamiento social preventivo y obligatorio equivalente al mismo que se anota en período de vacaciones, este acuerdo apunta a profundizar el trabajo conjunto entre las principales jugadoras del sector de las telecomunicaciones.

El «yo te banco» telco que se promovió en esta oportunidad alcanza a los más de 33.000 kilómetros de fibra óptica de Arsat, los más de 32.000 kilómetros de la de Telefónica y los 13.000 kilómetros de la infraestructura que posee Silica Networks, según datos de las empresas, además de las extensiones que poseen Telecom y Claro.

Sobre ellas se suma, a su vez, la infraestructura de red móvil, conformada por más de 25.000 radiobases 4G, según datos de ENACOM de septiembre de 2019. Esta cifra podría rondar las 30.000 radiobases si se contabilizan las tecnologías 2G, aún en funcionamiento, y 3G.

En cuanto a sitios, es decir, los espacios físicos en donde se establecen las antenas, las tres principales prestadores suman unos 20.000. Esta cantidad no ha crecido mucho en los últimos años, y de su mayor existencia depende también una mejor calidad de los servicios.

Personal posee la cobertura más ampliaen 4G, con más de 1.600 localidades, seguida por Claro, con más de 1.300 localidades, y Movistar, con más de 1.100 localidades, de acuerdo a datos de las empresas a marzo de 2020.

Es esta tecnología móvil la que hoy permite que haya un consumo creciente de datos y la que se pretende preservar en caso de que una emergencia no experimentada hasta ahora sature los tendidos de la infraestructura fija.

Para que no se caiga

Liderado por Arsat, que dirige Pablo Tognetti, por el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM), a cargo de Claudio Ambrosini, y por la subsecretaría de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, bajo la responsabilidad de Martín Olmos, el objetivo es todavía más amplio: que las principales operadoras puedan darse soporte mutuo frente a alguna contingencia también apunta a que ninguna de las compañías enlazadas a ellas, como cooperativas, pymes y pequeñas prestadoras del país que atienden localidades más pequeñas o a las que no llegan las principales compañías, también tengan garantizado el servicio.

Este acuerdo también se celebró por la vía de la videoconferencia y se firmó de manera digital. Luego, por medio de un comunicado, el Gobierno indicó que «así como toda la Argentina se unió ante este enemigo invisible, los actores del sector de las telecomunicaciones se suman en esa dirección con el objetivo de ayudar para que cada argentino y argentina pueda trabajar, estudiar y contribuir desde sus hogares, hospitales, municipios y fuerzas de seguridad».

«Si hoy se cae la conectividad, se cae la salud, la seguridad, la educación, el teletrabajo. La Argentina precisa de todos y precisa sobre todo la conectividad. La Argentina tiene la suerte de aprender de las experiencias internacionales, por eso debemos considerar la necesidad real de adelantarnos a cualquier incidente que hoy desconecte la Argentina. Y privados y Estado nos ponemos en pie de igualdad para pensar, para planificar y para actuar», expresó Ambrosini, durante el encuentro virtual.

En el mismo sentido se manifestó el subsecretario Olmos quien, en diálogo con iProfesional, sostuvo que «la mesa de trabajo se conformó con el objetivo de darse soporte mutuo en caso de que se produzcan cuellos de botella o se generen tensiones que la epidemia pone sobre las redes de telecomunicaciones. Y que, a partir de esta situación, nadie saque ventaja sino que todos colaboren. El Estado proicia el ámbito para acercar a las partes mientras que las acciones particulares las realizarán las empresas entre sí».

Desde hace más de dos semanas el Gobierno nacional mantiene reuniones constantes con las empresas de telecomunicaciones y con las de las tecnologías de la información, a fin de que sumen sus esfuerzos para dar soporte a las medidas que se vienen tomando a nivel político: desde garantizar la conectividad al grueso de la población hasta brindar herramientas que permitan mantener la actividad por la vía de las nuevas tecnologías, incluyendo a la economía y la educación.

Por esa razón, los directores de Arsat, Marcelo Tesoro y Facundo Leal, también se expresaron la necesidad de trabajar de manera mancomunada durante la situación de emergencia.

«Esto es el inicio de un gran marco para ir sumando a otras redes del interior, como las Sapem (Sociedad Anónima con Participación Estatal Mayoritaria), las pymes y las cooperativas, y representa el enorme trabajo que nos espera en esta emergencia», sostuvo Tesoro.

En tanto, Leal señaló que «solo el Estado y los privados, así como las cooperativas y todas las expresiones de las telecomunicaciones, grandes y chicas, podemos garantizar el sostenimiento de las redes y la conectividad, tal como nos lo encomendó el presidente».

Los acuerdos entre empresas de telecomunicaciones para promover un consumo responsable de internet en el medio de la pandemia comenzaron a escucharse hace un par de semanas en Europa cuando la pandemia comenzó a golpear con fuerza en Italia primero y en España después.

Tal como viene ocurriendo en la Argentina, el impacto de ese mayor tráfico, que por momentos alcanzó subas en torno al 50%, motivó a que los principales prestadores que operan en España emitieran un comunicado conjunto con ese objetivo.

En paralelo, la Comisión Europea también instó a los proveedores de streaming que colaboraran con el impacto que el mayor consumo de esos servicios para prevenir un mayor stress de las redes en situaciones de emergencia.

Estas son las experiencias que se replican, de algún modo, en la Argentina aunque con un escenario de conectividad muy distinto, especialmente por cobertura de redes de mejor tecnología y calidad de servicio. Y es también el espejo en el que, de alguna manera, se miran las autoridades nacionales para adelantarse a cualquier situación que deje a la población desprotegida en términos de comunicaciones.