(Pagina 12) La crítica situación de las cooperativas de servicios públicos (electricidad, gas y agua potable) en gran parte del interior del país es una de las preocupaciones centrales del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inae), en el medio de la pandemia por el Covid-19. Así lo manifestó su titular, Mario Cafiero, en videoconferencia con la Comisión de Asuntos Cooperativos de la Cámara de Diputados.

Cafiero confirmó que se han solicitado a Cammesa la suspensión de cobros e intereses a las cooperativas, y que gestiones similares se realizaron ante el Enargas para “postergar pagos adelantados”. Unas 1200 cooperativas y mutuales ya han gestionado ayuda económica al Estado, mientras que muchas de ellas, al igual que fábricas recuperadas, reorientaron su producción a insumos básicos para afrontar le emergencia sanitaria.

El titular del Inae también llamó a fortalecer las mutuales de consumo para facilitar el abastecimiento de alimentos a precios más accesibles para la población.

En su informe ante los diputados, Cafiero detalló que hoy existen en el país más de 12 mil cooperativas –entre las que se destacan las de seguros y de producción de alimentos– y cerca de 4 mil mutuales, destinadas mayoritariamente a la salud, el turismo y la ayuda económica. Una estructura que aglutina “más de 28 millones de argentinos que están en alguna cooperativa o mutual” y que representa un “10 por ciento del Producto Bruto”. Se trata de un sector de la economía de producción y generadora de fuentes de trabajo que, para el funcionario, es fundamental para afrontar la pandemia, y especialmente para la etapa post-coronavirus.

Cafiero detalló que fue un sector muy golpeado durante la gestión de Cambiemos, que “dio de baja a 10 mil cooperativas y 3 mil mutuales”, y que en el presupuesto 2019 no destinó ninguna partida al Inae. Una situación que ahora agravó la pandemia. Cafiero sostuvo que el Inae colaboró en la gestión ante el Ministerio de Trabajo por la que 1200 cooperativas pidieron ayuda económica: 300 solicitaron acceder al Repro (Programa de Recuperación Productiva) que destina 16 mil pesos por trabajador y otras 900 pidieron inscribirse en la ayuda económica denominada “Línea 1”, que asigna entre y 6 y 9 mil pesos para cada trabajador. “Una pequeña ayuda para enfrentar la emergencia”, afirmó Cafiero.

La mayoría de las preguntas de los diputados estuvo dirigida a la crítica situación económica de las cooperativas de servicios públicos en sus provincias. Allí Cafiero detalló los pedidos a Cammesa (Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico), para postergar los pagos de las cooperativas y cancelar los intereses por la mora. Lo mismo que planteó ante el Ente regulador del gas. Así como la asistencia económica que entabló con el Enacom, para asistir a las cooperativas que trabajan con el tendido de fibra óptica y la conectividad de Internet en distintas provincias.

Las cooperativas reclaman que se habilite durante la cuarentena, ventanillas de atención al cliente para poder cobrar el servicio, ya que en la mayoría de los pueblos del interior la modalidad de pago más extendida es el pago en efectivo. Un tema que el titular del Inae llevará al comité de emergencia que analiza incorporar actividades en la cuarentena administrada.

Cafiero también se explayó sobre las directivas que dio el Ministerio de Desarrollo Productivo (del que depende el Inae) para fortalecer el sector cooperativo y mutual. Entre ellas, la creación de un fondo de mil millones de pesos para extender la ayuda que el Inae destina a subsidios y créditos a tasa del 6 por ciento anual. Además de la reapertura del registro para que cooperativas y mutuales puedan acceder a los créditos del Estado con un interés anual del 24 por ciento; trabajar en una amnistía para que las cooperativas y mutuales que perdieron la personería puedan reinsertarse en la economía formal, mientras trabaja en un “trámite expres” para en “no más de un mes” otorgarle el registro a las que la soliciten, pero con un control estricto para “evitar el fraude a través de actividades con fines de lucro”.

Por Miguel Jorquera