(El Cronista) – Son datos oficiales. La comparación es interanual, pero la tendencia se mantiene contra el segundo trimestre de 2016. Fuerte baja en la producción de combustibles.

En medio de la discusión tarifaria, el Indec dio a conocer el informe del tercer trimestre del sector energético, el cual muestra una caída de la producción de energía. El Indicador Sintético de Energía (ISE) releva los niveles de producción de energía que alcanza al gas, el petróleo y la eléctricidad. El indicador muestra caídas en los últimos tres meses, en coincidencia con la baja de los indicadores de actividad económica.

Así, el ISE del tercer trimestre de 2016 descendió 4,2% en la serie con estacionalidad contra igual lapso del año pasado.

Si se compara el indicador de julio-septiembre con el del segundo trimestre de este año, en términos desestacionalizados, la caída alcanza a 4%, de acuerdo al organismo que lidera Jorge Todesca.

En lo que se refiere al sector eléctrico, el trabajo trimestral del Indec señala que la generación neta de energía cayó 2% respecto de igual período de 2015. Si la comparación se hace entre los nueve meses de 2016 e igual lapso del año pasado, se observa una suba de 1,1 por ciento.

En lo que se refiere a la demanda interna del Mercado Eléctrico Mayorista (MEM) durante el tercer trimestre descendió 1,3%, respecto de igual período del año anterior, y las empresas tienen la expectativas que la demanda interna, la dotación de personal y las horas trabajadas no variarán.

Para el sector gasífero, el trabajo observa un crecimiento en lo que entregaron a los entes oficiales, subdistribuidoras y centrales eléctricas. Pero, en cambio, se verificaron descensos en el gas destinado a comercios, industrias y estaciones de gas natural comprimido, lo que evidencia la retracción en la producción industrial.

Mientras esperan las audiencias públicas en los primeros días de diciembre, las empresas gasíferas aseguraron que en el cuarto trimestre de 2016 accederán a créditos, que se orientarán a financiar nuevas inversiones, a las que se encuentran en ejecución y a la compra de insumos.

Por último, en lo que se refiere a la producción de derivados del petróleo, la variación acumulada presenta subas en gas butano y licuado de petróleo. Si la comparación se hace entre los nueve meses de ambos años, se verican subas en las producciones de gas butano, nafta súper y gas licuado de petróleo, mientras presentan descensos las producciones de naftas común y premium, gasoil, combustible para retropropulsión, propano, diésel oil y fueloil neto del destinado a centrales eléctricas.

Estos descensos en los combustibles fueron suplantados por un alza de más de 25% en la importación.

En el apartado que se refiere a las expectativas del sector para el último trimestre del año, en ninguno de los tres sectores las empresas prevén un incremento de la demanda y, por ende, modificaciones significativas de personal.

El dato más llamativo se refiere a los insumos importados para el sector eléctrico. A pesar de que el cuarto trimestre es la previa a los picos de consumo del verano, el 80% de las empresas no prevé importar insumos y, de 20% que si lo hará, el 50% estima que bajarán respecto a igual período del año pasado.

El uso de la capacidad instalada del sector energético para el cuarto trimestre. en el caso de las petroleras; el 50% prevé un uso por debajo del 80%; las gasíferas el 22,2% utilizará entre 60 y 80% y en el sector de electricidad, que tiene que afrontar el momento del año del pico de consumo, el 60% de las empresas prevé utilizar entre 80 y 100% de sus instalaciones.