Las peripecias del gobierno de Daniel Scioli para lograr la reforma impositiva terminaron ayer con la sanción de la ley en la Legislatura bonaerense, por la que se prevé que la Provincia podrá sumar unos $ 2.685 millones el año próximo, que le permitirán aliviar sus finazas. Un decreto del gobernador que estableció el revalúo de las tierras permitió destrabar el tratamiento del proyecto en Diputados y tras una ajustada votación pasó al Senado para su sanción.
Los diputados opositores no dieron quórum en tres oportunidades en las que se frustró la sesión. Pero tras el decreto de Scioli, los diputados del Frente Amplio Progresista (Fap) y del Pro Peronismo permitieron que se aprobara el proyecto. La nueva ley es fuertemente rechazada por el sector agropecuario por la suba en el impuesto Inmobiliario Rural. Aunque el mayor motivo de rechazo de los ruralistas es el revalúo de las tierras, porque las nuevas valuaciones influirán también en impuestos nacionales, como el de Bienes Personales.
El decreto de Scioli fija las nuevas valuaciones inmobiliarias para la tierra libre de mejoras de las plantas rural y subrural, y faculta a la Agencia de Recaudación de Buenos Aires (ARBA) a aplicar esos nuevos valores para la determinación de los tributos.
En los fundamentos, el gobernador explicó que “la falta de actualización del valor de la tierra rural es un problema estructural de la Provincia”, y recordó que “la única valuación fiscal importante fue realizada en 1955, en oportunidad de llevarse adelante el primer catastro”.
“Hoy, en términos fiscales, el valor de toda la tierra de la provincia de Buenos Aires es de 20.500 millones de pesos, menos de la mitad del parque automotor, con un valor promedio de $ 1.050 por hectárea”, graficó el titular de la comisión de Presupuesto en la Cámara baja, Darío Golía.
El exintendente de Chacabuco explicó que la norma consta de tres partes, que son “la reforma impositiva, el financiamiento para la Provincia y el fortalecimiento de los municipios”, y sostuvo que la necesidad de financiamiento “es para cumplir con servicios indispensables y con la pauta salarial”.
La Provincia prevé que, de la mejora en la recaudación, unos $ 1.000 millones serán girados a los municipios. También la nueva ley otorga al Ejecutivo provincial permiso de endeudamiento a través de letras de Tesorería por unos $ 2.400 millones. Además de aumentos en el Inmobiliario Rural se establecen subas en las alícuotas del impuesto a los Ingresos Brutos y también en el impuesto a los Sellos.
El aumento en Ingresos Brutos fue uno de los puntos cuestionados por la oposición, fundamentalmente por el Frente Amplio Progresista, que consideró que Buenos Aires “sigue siendo la de mayor presión tributaria del país”, según sostuvo el diputado Abel Buil. Sin embargo, a pedido de ese bloque se mantuvo la exención en el pago de Ingresos Brutos para las cooperativas, que el gobierno bonaerense había previsto gravar en la propuesta original.