(ámbito) Con más de 250 proyectos, requerirá una inversión cercana a los $800.00 millones. Ámbito dialogó con Guillermo Jelinski, Subsecretario de Recursos Hídricos de la Provincia. Por Carlos Pagura
Con más de 250 proyectos enfocados en obras hidráulicas, sistemas de agua potable, drenajes, cloacas y plantas depuradoras, el nuevo Plan de Infraestructuras de Agua y Saneamiento bonaerense fue concebido como un diseño quinquenal que abarca también la confección de alertas tempranas en las cuencas, la inclusión del cambio climático como un factor de riesgo fundamental y el propósito de afianzar una «cultura sostenible del agua».
Con una inversión proyectada en torno a los 800.000 millones de pesos, la principal fuente de financiamiento provendrá de instituciones internacionales como el Banco de Desarrollo para América Latina, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) e inversiones privadas.
Ámbito dialogó con Guillermo Jelinski, Subsecretario de Recursos Hídricos bonaerense. antes de su presentación en el primer encuentro del ciclo de entrevistas «LÍDER H2O», organizado por ALADYR y Futuro Sustentable. Ingeniero Hidráulico y Civil con dos maestrías en Medio Ambiente y Recursos Hídricos, dijo que “uno de los principales problemas es que la Provincia no recolectaba datos” y explicó que “el plan no se termina en esta gestión, está planificado a 20 años”.
Periodista: ¿Cómo definiría el plan?
Guillermo Jelinski: No es solo un plan de infraestructura, nuclea distintos organismos y también está muy ligado al desarrollo y la producción y a las necesidades de seguridad. Abarca obras hidráulicas, proyectos de agua y saneamiento, redes de agua potable y cloacales, plantas potabilizadoras y de tratamiento de efluentes, más de 1.000 kilómetros de limpieza de arroyos, sistemas de alerta meteorológica temprana, capacitación de profesionales.
P: ¿Es posible concretarlo en cinco años?
GJ: Esta es una primera etapa, el plan integral no se termina en esta gestión, está planificado a 20 años.
P: ¿Qué inversión requiere?
GJ: El plan total requiere de unos 2.000 millones de dólares por año, tomando en cuenta obras hidráulicas para agua y cloacas, de vialidad, escuelas, convenios con municipios, viviendas, energía. En total, alrededor de 800.000 millones de pesos. Está cubierto en un 50% y para el otro 50% estamos trabajando con el gobierno nacional y organismos de crédito internacionales.
P: ¿Dónde se centrará el foco?
GJ: Si conseguimos el financiamiento las obras resolverán problemas como la calidad del agua o el tratamiento de efluentes, para lo que queremos hacer 11 plantas en localidades del interior. También nos centraremos en las obras hidráulicas de protección para disminuir el riesgo de inundaciones y en preparar sistemas de alerta inteligente, que analizan el riesgo en base a una red de datos hidrometeorológicos online, que registra la humedad, la cantidad de lluvia, los niveles de los cauces, y permite conocer en tiempo real el estado de las cuencas y actuar en base a modelos para dar el alerta de inundaciones. Además de la prevención, si los valores superan el diseño de las obras hay que estar preparados para reaccionar.
P: ¿Se cuenta con la información suficiente?
GJ: Uno de los principales problemas es que la Provincia no recolectaba datos. Hace 50 años las redes de medición eran muy buenas pero se fueron degradando y hoy casi no existen. Debemos aprovechar las nuevas herramientas tecnológicas, los datos de los satélites, los sensores remotos, y vamos a distribuir más de 300 estaciones hidrometeorológicas en todo el territorio.
P: ¿El cambio climático es un nuevo factor a tener en cuenta?
GJ: Es una variable fundamental. La estamos incorporando en los modelos climáticos, porque es imposible no pensarlo en todo lo que tiene que ver en el diseño de cualquier obra y en los planes de contingencia para saber cómo se comporta una cuenca. Y hace dos meses que varios agentes con rango elevado de la Subsecretaría están en el curso de capacitación y diplomatura sobre cambio climático que está dando el ministerio de Ambiente con las universidades de Quilmes y Jujuy.
P: Habla de inculcar una cultura sostenible del agua, ¿qué significa?
GJ: Estoy trabajando en un plan estratégico basado en ese tema, en el agua como ordenador del territorio, en el mejoramiento de la información ambiental y en proyectos de sustentabilidad en el uso del recurso hídrico, porque no podemos seguir sobreexplotando pozos o generando intrusión salina, tenemos que proteger los ecosistemas, los humedales. Tenemos que cuidar los recursos para las generaciones que vienen.
P: ¿En esta etapa el plan se desarrollará en toda la Provincia?
GJ: Abarcará todos los municipios. Ya nos reunimos con más de 90 intendentes y fuimos recolectando sus necesidades inmediatas, ellos están en el frente de batalla y conocen la problemática de sus localidades. Allí definimos las prioridades de una serie de proyectos y hablamos de no quedarnos en el corto plazo, porque este plan tiene que tener sustentabilidad en el tiempo. También trabajamos con las cooperativas de agua, hay más de 300 dando servicio y fueron una fuente de datos fundamental junto con las prestatarias y las universidades. Así pudimos terminar de lanzar el atlas de las cuencas, gratuito y disponible en la web, que permite observar el territorio con sus zonas altas y bajas y conocer cómo se comporta.