Según la información del INDEC, el alza se debió fundamentalmente a un aumento del 40 por ciento en las cantidades compradas en el exterior, mientras los precios descendieron un 1 por ciento, siempre en relación con igual período de 2011. El informe oficial reveló que aumentaron las compras de fueloil, gas natural, GLP (gas licuado de petróleo), gasolinas excluidas de aviación y querosenes de aviación.
En mayo, las importaciones de combustibles representaron u$s 450 millones más que en abril; se confirma así que la necesidad de comprar más gas y fueloil en el exterior se acentúa cuando empiezan los meses fríos. Se importó más gas desde Bolivia, más gas licuado para regasificar en los buques instalados para ese fin en Bahía Blanca y Escobar, y más fueloil que usan las centrales de generación eléctrica cuando por las bajas temperaturas se les corta el gas para poder cubrir la demanda de los hogares.
Como la temperatura promedio a nivel nacional se mantuvo en mayo por encima de los valores históricos, la necesidad de importar más cantidad se vincula directamente a la persistente caída de la producción local de gas, que se ubica ya por debajo de los 100 millones de metros cúbicos diarios, 30 millones menos que en 2003.
En mayo, las exportaciones energéticas crecieron un 15 por ciento, a u$s 450 millones en relación con igual mes del año anterior, debido a un aumento del 17 por ciento en los volúmenes vendidos, ya que los precios mostraron también un descenso del 1 por ciento. Las ventas externas de productos energéticos se focalizaron en petróleo crudo destinado a China y a Chile, mientras el INDEC reveló bajas en las exportaciones de nafta para petroquímica, propano y butano hacia Brasil, y de GLP hacia Chile. Si se consideran los cinco primeros meses del año, las importaciones energéticas crecieron un 21 por ciento en relación con el mismo período de 2011; totalizan así u$s 3.530 millones. Las exportaciones, en tanto, sumaron u$s 2.858 millones, con un aumento del 8 por ciento, de modo que el déficit en la balanza de productos energéticos fue de u$s 672 millones entre enero y mayo. En el mismo período, las importaciones de combustibles aumentaron su participación en el total de compras al exterior al pasar del 11 por ciento en igual lapso de 2011 al 14 por ciento. Las exportaciones, en cambio, mantuvieron igual participación del 8 por ciento que en el año anterior.
En 2011, las importaciones energéticas subieron un 110 por ciento y alcanzaron a u$s 9.400 millones; este dato fue el que disparó el malestar con los accionistas de YPF y la posterior reestatización, ya que el Gobierno consideró que la caída en la producción de petróleo y gas de esa empresa explica la creciente necesidad de importar.
En 2011, el déficit de la balanza energética fue de u$s 3.250 millones y se estima que este año podría superar u$s 5.000 millones, aun con las presiones que ejerce el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, para contener las compras al exterior y mejorar el saldo comercial del año.