Durante su visita a la Argentina, el director del Centro de Desarrollo Otalora y responsable de Educación Cooperativa de Mondragón, Juan Ignacio Aizpúrua, recorrió cooperativas y la megamuestra Tecnópolis, además, participó del Congreso Internacional Educación y Solidaridad. El 23 y 24 de julio brindó un curso para jóvenes líderes de emprendimientos asociativos. En diálogo con Ansol, destacó el crecimiento del movimiento en el país y la participación de los jóvenes. En tanto, subrayó la estrategia que lleva a cabo Mondragon en el nuevo escenario de crisis que vive Europa.
-Después del recorrido que realizó por empresas sociales y por el Pueblo Cooperativo que el sector montó en Tecnópolis, ¿Cuál es la impresión que se lleva del asociativismo en el país?
-Tras recorrer Tecnópolis he visto varias de las experiencias cooperativas y me llamó la atención la presencia del asociativismo en la sociedad argentina como en ningún otro sitio ni evento. Aquí, la realidad cooperativa aprovecha un recinto y sale al público, se presenta mientras que nosotros nunca hicimos ese ejercicio de salir a la sociedad.
-Además, recorrió otros emprendimientos asociativos.
-Sí, he visitado varias cooperativas, por ejemplo, a la Cooperativa de Trabajo Proyecto Coopar, que es una empresa con asociados muy jóvenes, y la Cooperativa Artes Gráficas Chilavert en donde hicimos una pequeña asamblea para conocer la experiencia de Mondragón e intercambiar. También conocí La Cacerola.
-En cuanto a las jornadas en las que participó para analizar el vínculo entre educación y solidaridad así como también en el curso que brindó para jóvenes líderes, ¿Cuál es la síntesis que puede hacer tras su intervención?
-En el Congreso Internacional Educación y Solidaridad pude conocer las experiencias en formación cooperativa que brindan diferentes universidades argentinas, así como cambiar impresiones sobre la realidad, claves y el desarrollo de la corporación cooperativa, temáticas que también abordé durante el Curso- ECM- sobre la experiencia cooperativa de Mondragón, para 40 jóvenes líderes en donde me impresionó la cantidad de información que demandaron los participantes, a la vez que celebro la capacidad de los nuevos emprendedores.
-Volviendo a la región en la que se encuentra la cooperativa que representa y tras la crisis europea, ¿Cómo se planta la corporación cooperativa económicamente?
-Mondragón ha pasado por varias dificultades y pone, en cada ocasión, mecanismos de intercooperación internos para reubicar a personas de una cooperativa a otra, también medidas anticrisis adecuándose a la realidad.
Puntualmente, en esta última crisis, desde nuestra corporación cooperativa fuimos superándola a través de la exportación, de la internacionalización y ya un 75 por ciento de nuestros productos se envían a varias partes del mundo; qese es un elemento que apuntala fuertemente el mantenimiento del empleo de otras cooperativas de Mondragón.
En Argentina, luego de la crisis del 2001, se comenzaron a autogestionar empresas que quebraron o bien se conformaron emprendimientos asociativos, ¿Considera que puede suceder lo mismo en España?
-En cuanto a la autogestión, no es tan clara en España pero en demanda de crear nuevas cooperativas es una realidad. Y evidentemente en este ciclo en que la economía está cayendo hay situaciones que alientan el armado.
