El Gobierno presentó ayer el Presupuesto para 2014 en el que prevé disminuir la expansión del gasto, llevar el tipo de cambio oficial a $6,33 y el crecimiento del producto a 6,2 por ciento. Para eso, estudia recortar subsidios a los sectores de altos ingresos (como hizo luego de las elecciones de 2011) y recortar medidas contracíclicas. La ley de leyes, que podría tener media sanción en Diputados en dos semanas, prevé una recaudación del orden del billón de pesos, mientras que la inflación oficial se estima en un 9,9% para el año que viene y en 10,5% para el actual.
“Hay gente con salarios elevados que recibe subsidios. Es una política que hay que mejorar”, sentenció el viceministro de Economía, Axel Kicillof, ayer durante la presentación del Presupuesto frente a los diputados de la comisión que trata esa ley. “Son una política redistributiva permanente”, agregó el economista, en referencia a las transferencias que el Gobierno amagó con recortar tras las elecciones de 2011, pero que luego dio marcha atrás. Kicillof, sin embargo, defendió los subsidios energéticos porque eso, opinó, previene al sector productivo de los “movimientos especulativos asociados al mercado del petróleo”. En su discurso, el secretario de Política Económica dijo que China se convirtió en un importador neto de energía, lo que “cambió muchísimo la matriz mundial”.
“Buena parte de las medidas contracíclicas que se tomaron en 2013 no van a ser necesarias en 2014”, advirtió Kicillof, que estimó que va a haber una inversión privada fuerte y menos aportes que en este año a YPF y Pro.Cre.Ar. “Habrá una menor expansión del gasto”, anunció. Efectivamente, el gasto público crecerá 18% según la estimación del Gobierno, frente a un promedio del 30% de los últimos años. En cuanto al Presupuesto, que fue presentado por la mañana por el titular del Palacio de Hacienda, Hernán Lorenzino, el equipo económico estimó para 2014 un precio del dólar promedio de $6,33, una inflación de 9,9%, un crecimiento económico de 6,2%, una soja a u$s486 la tonelada y un superávit comercial positivo de 10.124 millones de pesos. Además, para lo que queda del actual año, el funcionario proyectó una inflación de 10,5% (lo que implica una desaceleración de los precios para el resto de 2013), un incremento del producto de 5,1% (0,7% más que lo estimado el año pasado) y un saldo comercial de 10.556 millones de dólares.
En cuanto a las cuentas públicas, esperan que este año acabe con un déficit fiscal de $46.686 millones (fue de casi $14.000 millones en el primer semestre) y con 431,4 millones de superávit primario, mientras que para 2014 se estima un resultado primario de 83.889,3 millones y un superávit financiero de 3.579,1 millones de pesos.
En la ley de leyes se incluyó un aumento de 73,8% de los intereses de la deuda pública en moneda nacional, que será de 77.247,6 millones de pesos. Por su parte, el secretario de Finanzas, Adrián Cosentino, también presente ayer, especificó que, desde octubre, la deuda privada en dólares será del 8,5% del PBI, “lo que nos pone en niveles inéditos”, según expuso. Además, especificó que los vencimientos de deuda previstos para 2014 son de unos u$s13.000 millones en dólares y otro tanto en pesos, de los cuales serán para los privados unos u$s5.200 millones en dólares y unos u$s4.600 en pesos).
Para eso, el Estado espera recaudar un monto superior al billón de pesos, como lo había adelantado hace algunas semanas el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray. En concreto, se esperan unos ingresos tributarios de 1,097 millones, 25,5% más que lo proyectado para el año pasado.
En una inusual jornada, el oficialismo presentó el Presupuesto el mismo día en el que lo trató en la comisión de Diputados que preside el legislador del Frente para la Victoria (FpV), Roberto Feletti. Alrededor de las 12 Lorenzino presentó los lineamientos generales, y los secretarios Kicillof, Cosentino y el de Hacienda, Juan Carlos Pezoa, expusieron durante casi cinco horas en el mismo recinto.
Los diputados opositores se quejaron por no poder contar con el proyecto en sus manos, por lo que sólo unos cinco legisladores no alineados con el FpV se quedaron hasta el final. Entre ellos, el economista Claudio Lozano, de Unidad Popular, que advirtió que “la evolución del gasto de la administración nacional es del 16%, y venía siendo del 32 por ciento. Es una estrategia de ajuste del gasto porque hay una tasa de inflación en torno al 20 por ciento”.
Kicillof proyecta más exportaciones para 2014
Kicillof, cuya exposición se extendió dos horas y media, estimó que «la mejora en el frente externo nos permitirá una mejora en las exportaciones”, la cual, según el cálculo oficial será del 5,2% en términos reales para sumar algo más del 538.000 millones de pesos.
Igualmente, el funcionario aclaró que “la normalización de las economías socias de Argentina va a continuar el año que viene, pero no esperamos un boom mundial pero si un repunte, que nos permitirá un aumento de nuestras exportaciones”, luego de explicar que la situación económica de esos países “explica la demanda al nuestro y eso importa en el presupuesto”. Por eso, especificó que “dependemos de la economía brasileña”, especialmente en el sector automotriz.
El viceministro de Economía adelantó sus proyecciones para el 2014 a los legisladores y dijo que “habrá una fuerte suba en el precio internacional del combustible” y “un menor precio para la soja y sus derivados, debido a una menor demanda de parte de China”, el funcionario mostró un moderado optimismo sobre lo que él denomino “una reacción” favorable de las economías de Estados Unidos, Europa y Brasil, aunque dijo que en este último el superávit comercial es por cuenta capital, “lo cual puede ser perjudicial si EEUU se vuelve una aspiradora de capitales”. “Brasil está sometido a fuertes presiones”, advirtió, y agregó: “en este punto somos cautelosos pero con optimismo”.
Por último, Kicillof dijo que “la mayoría de los analistas dicen que la soja va a seguir igual que ahora, salvo que la guerra afecte los commodities”.
