La oficialización del financiamiento del Complejo Hidroeléctrico en Santa Cruz, compuesto por la represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic que quedó formalizado el fin de semana permitirá sumar al sistema una potencia de 1.740 megavatios, en el marco del Plan Energético Nacional del Ministerio de Planificación y en busca de fortalecer la diversificación en la generación.
Luego de la finalización de la Central Binacional Yacyretá, la terminación de la central nuclear Atucha II, las Hidroeléctricas Caracoles y Punta Negra en San Juan, el Programa de Energías Renovables, se “avanza en la diversificación de la matriz de forma gradual”, según destacaron voceros de la cartera.
Las dos represas serán alimentadas por el río Santa Cruz, el tercer río más caudaloso del país y que cuenta con una excelente calidad hidroeléctrica global. Con este proyecto, y sumado a otras obras hidroeléctricas en cartera, se prevé que en los próximos diez años la participación de la hidroelectricidad en la matriz alcance el 41% (hoy próxima al 31%) y se busca así reducir fuertemente la participación de las energías térmicas, según se indicó. El complejo hidroeléctrico a construirse, abarca las represas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic, que tendrán 75,5 y 43,5 metros de altura respectivamente, generando dos embalses con una superficie total de 47.000 hectáreas. En la represa Néstor Kirchner se instalarán 6 turbinas tipo Francis que aportarán 1.140 megavatios de potencia, mientras que la represa Jorge Cepernic contará con 5 turbinas Kaplan de 600 megavatios totales.
Asimismo, los diques edificados además de atenuar las crecidas del río, podrán ser aprovechados para riego, lo que tornará cultivable más de 35.000 hectáreas de la Patagonia, promoviendo la expansión agrícola-ganadera y las cadenas de valor agro-industrial de la zona. Con los 1.740 megavatios de potencia instalada y los 5.246 gigavatios/hora de energía que por año aportará el proyecto, se podrá agregar a la matriz hidroeléctrica un 10% más de capa cidad y a la matriz eléctrica general aproximadamente un 4,7% más, lo que es comparable con una demanda de 1.500.000 hogares.
El combustible requerido para generar la energía que producirá el complejo hidroeléctrico es equivalente a 1.120 millones de litros de gasoil por año, lo que implicaría un costo de unos 1.000 millones de dólares anuales para adquirirlo en el mercado internacional.
Como la potencia que ofrecerá la central supera en más de 10 veces la demanda de la provincia de Santa Cruz, este complejo ofrecerá energía a todo el Sistema Argentino de Interconexión. Pocos años atrás esto hubiera sido imposible dado que no existía vinculación energética de Santa Cruz con el resto del Sistema.
Pero en los últimos años se invirtieron más de $6.000 millones para la construcción de 2.000 km de línea de interconexión que vincularon energéticamente a esa provincia con el resto del país. Se completaron 1.000 km de Línea Extra Alta Tensión desde Choele Choel a Pico Truncado y otros 1.000 km más hasta Río Gallegos, Río Turbio y El Calafate, enumeró el Ministerio de Planificación.
En cuanto al financiamiento externo, en agosto de 2012 se llevó adelante el llamado a licitación, promoviendo la participación de capitales nacionales y extranjeros a través de una serie de road show por diferentes países como Brasil, China y Rusia. En agosto de 2013 se anunció la adjudicación de la obra a la constructora local Electroingeniería SA junto a la empresa china Gezhouba Group Company Limited e Hidrocuyo SA, quienes presentaron la propuesta económica más baja y la mayor cobertura financiera.
Desde esa fecha se trabajó para cerrar, entre otras cuestiones, el esquema de financiamiento comprometido en la oferta económica del proyecto. De los u$s4.714 millones en que está valuada la obra un 80% ingresaría al país. Luego de la visita del primer mandatario chino se busca acelerar un desembolso inicial de unos 500 millones de dólares próximas semanas.
Costo comparativo
Estas centrales cuentan con costos de inversión eficientes a nivel internacional. Si se divide el costo total de las represas sobre la potencia instalada que ofrecerá al sistema, da un costo por megavatio a instalarse de u$s2,24 millones. Si se compara ese costo con otras grandes hidroeléctricas instaladas se observa la diferencia. . Las hidroeléctricas San Antonio ubicada en Brasil que produce 3.150 megavatios; Tocoma de Venezuela, de 2.250 megavatios y Sogamoso de Colombia de 820 megavatios se construyeron todas a razón que supera los u$s3,1 millones por megavatio instalado.
