Las cooperativas decidieron no pagar la energía a la APE y reclamaron al gobierno provincial que se haga responsable por la demora en la entrega de subsidios por el Pacto Eléctrico. La Fepamco ofreció pagar el 70 por ciento de la facturación, pero la Provincia no aceptó.
La situación es cada vez más tensa. Las cooperativas eléctricas de la provincia endurecieron su postura y como habían anunciado no pagaron ayer la facturación por el suministro de energía a la Administración Provincial de Energía (APE) por la demora en la entrega de subsidios nacionales, vinculados al Pacto Eléctrico Federal, y ante el rechazo del gobierno provincial de prorrogar otra vez el vencimiento de la boleta.
El monto total de la facturación por la electricidad asciende a los 10 millones de pesos y desde la APE afirmaron que algunas entidades ya abonaron, porque lo hacen en forma automática, aunque la decisión política de la Federación Pampeana de Cooperativas (Fepamco) fue que ninguna de las instituciones solidarias que tenía el pago pendiente lo realice.
El vencimiento de la facturación ya había sido prorrogado por el gobernador Oscar Jorge hasta ayer, pero ante la demora en el giro de subsidios nacionales del acuerdo que congeló las tarifas eléctricas por un año, y que solamente llegó a las cooperativas de General Pico, General San Martín y Abramo, la Fepamco pidió la extensión del vencimiento, algo que rechazó el Ejecutivo.
Idas y vueltas.
Ayer, la situación fue variando. En un primer momento, la APE comunicó a las autoridades cooperativas que analizaban acordar una salida alternativa, con el pago de la facturación por parte de las tres entidades que recibieron el subsidio y la CPE de Santa Rosa, abonando así más del 70 por ciento del total. Y además se respetaba la bonificación del 7 por ciento a aquellas entidades que no podían pagar.
Sin embargo, desde la administración provincial informaron luego que «lamentablemente» no se va a respetar la bonificación a las entidades solidarias que no pagaron el suministro de energía en tiempo y forma. Esto, sin dudas, profundiza aún más las diferencias, generando mayor tensión con el ámbito cooperativo, que reclama «voluntad del gobierno».
«Si pagan Corpico y Santa Rosa, se cubre más del 70 por ciento de la facturación de la provincia. Hicimos el esfuerzo, pusimos buena voluntad, porque ofrecíamos cancelar una parte de la facturación e ir pagando el resto a medida que entren los recursos aportados por el gobierno nacional, pero nos sorprendió la respuesta negativa, que no deja más alternativa que no pagar», aseguró a LA ARENA el titular de Fepamco, Abel Argüello.
Responsabilidad.
Consultado por Radio Noticias, el presidente de la CPE, Oscar Nocetti, dijo que antes de aceptar el Pacto Eléctrico, a lo que se negaban las cooperativas en principio, el gobernador Oscar Jorge les aseguró que ante cualquier inconveniente con los fondos nacionales, respondería la Provincia. «Entonces, ahora le pedimos que se haga cargo mientras Nación termina de aceptar las rendiciones», dijo.
El cooperativista afirmó que «no es que seamos ineptos, sino que en el caso de la cooperativa de Santa Rosa nos han cambiado las condiciones, a algunas les aprobaron y habilitaron los fondos, pero a otras como a la CPE le exigen mayor información. Por esa demora, pedimos postergar el vencimiento de agosto, considerando que la aprobación de las rendiciones no depende de nosotros».
Al igual que Argüello, Nocetti indicó que hasta que no reciban los subsidios «no se va a pagar la energía a la Provincia para no quedar en default» y que pensando en el próximo año, es «muy difícil y altamente improbable volver a aceptar un mecanismo de este tipo, porque tendríamos que tener nuestros equipos ocupados por mejorar las redes y no en si en Buenos Aires aceptan las rendiciones».
Más condiciones.
Nocetti también se quejó por ciertos cambios en los criterios del pago de las rendiciones. Según dijo, la CPE presentó rendiciones por dos millones y no les enviaron el total porque le retienen el 20 por ciento del anticipo. Pero además adujeron que la rendición era menor al anticipo y que entonces, «ese dinero previsto servía para abonar el anticipo que nos habían dado, o sea que no nos viene nada». Por eso, se demoró el pago y se les pidió desde Nación aportar otra rendición.
Desde la APE, sobre esta situación particular, contaron que la rendición de CPE estaba aprobada, pero que «hay una condición que conocimos la semana pasada vinculada a que el monto a rendir debía ser superior al anticipo que se había efectuado y la cooperativa presentó un valor inferior al anticipo realizado, entonces solicitamos que se haga la rendición de dos meses más para superar ese valor».
Adhesión con «cash».
Hubo cuatro cooperativas que pagaron el mes de agosto. Una la de Macachín, de la que uno de sus directivos es el actual subsecretario del sector, Claudio Marrón; la de Trenel; la de General Acha -que no integra Fepamco- y General San Martín. Esta última, una de las que se sumó ayer a la medida del movimiento cooperativo de no pagar a la APE por el servicio ya que el organismo no prorrogó nuevamente la fecha, aclaró mediante una nota a sus pares que abonó al gobierno «por un error administrativo».
La nota explicó que «si bien hemos recibido la acreditación de la rendición efectuada dentro del Plan de Convergencia Eléctrica, consideramos altamente injusto que el Estado Provincial no haya accedido a una nueva prórroga del vencimiento, hasta tanto se produjera la acreditación de aquellas rendiciones pendientes ante la APE y la Secretaría de Energía».
«Expresamos claramente nuestra posición solidaria con las cooperativas que aún no recibieron los aportes del subsidio y continúan sujetas al relato de compromisos no cumplidos por el Estado Nacional y Provincial», indicó el escrito.